Entrevista al conferenciante Carlos Andreu
Carlos Andreu destaca como un conferencista de renombre y un especialista en el ámbito del crecimiento personal y el liderazgo. Sus charlas se caracterizan por dejar una huella profunda en la vida de los numerosos individuos que ya han podido asistir a algunas de ellas.
Hoy hemos tenido la suerte de entrevistarle para conocer un poco más su trayectoria profesional como conferenciante motivacional. Si tu también quieres saber más acerca de Carlos Andreu, ¡esta es tu oportunidad!
Tabla de contenidos
1. Has tenido una carrera profesional diversa, ocupando cargos directivos y dedicándote a la consultoría y la escritura. ¿Cuál ha sido el momento más desafiante en tu trayectoria y cómo has logrado superarlo?, ¿qué lecciones aprendiste de esa experiencia?
Bueno, como dice la Biblia, ‘cada día tiene su afán’. Hay momentos desafiantes casi cada día. Es cierto que hay momentos más espectaculares, y otros menos espectaculares, pero desafíos hay en cada proyecto, en cada cliente, en cada clase, con cada alumno… Y creo que eso es parte del abono para esta vida. Es lo que da la sal e ilusión a nuestro día a día.
Para mí, que soy 100% presencial, el momento del COVID fue un shock. No solamente por lo médico, social o sanitario, sino porque me di cuenta de que online no era capaz de transmitir -ni de lejos- lo que transmitía en las sesiones cara a cara. Esas semanas en las que pensábamos que a partir de entonces ‘todo sería online’ fueron terriblemente inspiradoras en todo lo que tenía que ver con autocontrol, confianza, repensar el modelo de negocio. Tenía claro que yo online no disfrutaba con mi trabajo, y eso había sido siempre un hecho importantísimo en mi trabajo: he trabajado siempre en cosas que me hacen disfrutar. Tengo esa inmensa suerte. Y si el online no me permitía disfrutar, prefería buscar otra ocupación antes que hacer algo a disgusto. Ojo, no confundir esto con que haya cosas de mi trabajo que no me cuesten, porque hay muchas cosas que me cuestan y mucho. Pero precisamente esas ‘cuestas’, llamémosle si quieres, retos, son las que te hacen disfrutar más. Pasó la pandemia, volvimos a la normalidad, y seguimos disfrutando.
Otro momento importante fue aquel en el que tomé la decisión de dejar la compañía en la que estaba, en una cierta zona de confort, para adentrarme en el mundo de la formación trabajando ‘por cuenta propia’. Ese salto ‘al emprendimiento profesional’ siempre da un cierto vértigo. Pero tuve la inmensa suerte de recibir el apoyo de mi familia, y como saltaba a hacer algo que me apasionaba, la inmensa fortuna de pronto, empezar a obtener excelentes resultados.
2. Ofreces dos tipos de ponencias, una enfocada en la motivación e inspiración y otra centrada en el autoconocimiento a través del test DiSC. ¿Cuál crees que es el beneficio más importante que los participantes obtienen de cada tipo de conferencia?
Yo diría que la sesión más motivacional e inspiracional ayuda a los asistentes a:
1. Evaluar sus actitudes ante la vida:
- con uno mismo: desarrollando su capacidad de autocontrol, de autoestima…
- con los demás: gestionar su capacidad de empatía, hacer crecer su asertividad…
- con el entorno: ser conscientes de la necesidad de la versatilidad y de la adaptación a los cambios.
2. Reflexionar sobre el sentido de su vida, su misión, sus porqués, sus valores fundamentos básicos, y en su caso reorientarlos.
3. Elaborar un plan de acción personal para su mejora
En definitiva: ser consciente de si uno está viviendo su propia vida o la vida que otros se han empeñado en que viva. Ayudar a la gente a convertirse en los protagonistas de su propia vida, desarrollando para ello toda su capacidad actitudinal.
La sesión de la personalidad está más enfocada a:
- Evaluar la capacidad de relación de cada uno de los asistentes con los demás.
- Mejorar el clima de relación entre jefes y subordinados… al ayudarles a entenderse mejor y a desarrollar nuevas habilidades de comunicación.
- Mejorar el conocimiento mutuo del equipo (sus competencias y habilidades más innatas), y fomentar el team building.
- Remover las conciencias de los asistentes de cara a mejorar sus capacidades actitudinales.
3. Sabemos que utilizas ejemplos de la vida real y compartes experiencias personales durante tus conferencias. ¿Podrías compartir algún ejemplo destacado que haya dejado una huella significativa en los asistentes?
Yo creo que uno de los grandes mensajes que a la gente más le llega es el de la necesidad de ‘celebrarlo todo’. Me encuentro con muchos antiguos alumnos que tiempo después me siguen recordando este asunto. Creo que vivimos en un mundo en el que algunas personas no nos dejan ser felices y nos impiden disfrutar de las cosas. Ser capaces de encontrar pequeños momentos de disfrute entre las pequeñas cosas del día a día se ha convertido en un deporte necesario. El mundo ya es suficientemente complicado para que encima nos cueste encontrar, entre medio de tantas incertidumbres y complejidades, momentos para celebrar la vida. Deberíamos encontrar cada día un momento y una excusa para celebrar algo con nuestra gente (un santo, un aniversario, que un amigo ha recibido un ascenso, una felicitación por un trabajo bien echo, una sonrisa…).
Ser felices depende de cada uno de nosotros. Y si nosotros somos felices, haremos felices a los demás. Y ‘celebrándolo todo’, especialmente con la gente que queremos, daremos buenos y firmes pasos en busca de esa felicidad.
4. Como autor del libro "Del Ataúd a la Cometa", ¿qué mensaje fundamental deseas transmitir a través de tu obra y cómo se relaciona con las temáticas que abordas en tus conferencias?
El título tiene un doble sentido. Por un lado, que solo con una vida equilibrada en nuestras relaciones familiares, laborales, personales y sociales seremos capaces de llevar una vida plena. Si uno vive en equilibrio, volará como una cometa. Si uno vive desequilibrado, se arrastrará como un muerto en vida, con la angustia y la pena de la falta de una de las patas importantes de la vida.
Por otro lado, el título quiere indicar que todos somos capaces de pasar de una vida ‘de zombies’, triste, gris, oscura… a una vida plena, que nos permita volar con las águilas y no picotear con los pollos. El que vuela alto tiene siempre una mejor visión de lo que pasa, y es capaz de encontrar más soluciones a sus problemas, de divisar los problemas que pueden venir en el horizonte. Por eso, cuanto más arriba volemos nuestra cometa, más fácil nos resultará sacarle todo el jugo a lo que la vida nos ofrece.
5. Volviendo al test DiSC (el cual utilizas en tus conferencias sobre autoconocimiento como herramienta para ayudar a las personas a comprender su estilo de comportamiento), ¿cuáles crees que son algunos de los principales insights que los participantes pueden obtener al descubrir su estilo y cómo esto puede impactar en su vida personal y profesional?
Todos elegimos a nuestros amigos o a nuestra pareja, pero no siempre podemos elegir a nuestros jefes, a nuestros colegas, a nuestros subordinados, a nuestros clientes. Por eso resulta fundamental entender por qué otras personas se comportan de manera distinta a como nos comportamos nosotros. Entender nuestro comportamiento y el de los demás nos ayudará en muchos ámbitos de la vida personal (predecir comportamientos, mejorar la comunicación…).
Pero en el ámbito profesional ayuda en muchos aspectos. Además de en el conocimiento de uno mismo y de los demás, es útil para:
– Mejorar la administración de personal.
– Ayudar en la contratación de personal.
– Ajustar la idoneidad de personal en puestos de responsabilidad.
– Mejorar los canales de comunicación.
– Formar y optimizar los equipos de trabajo.
– Mejorar la Atención al Cliente.
– Ayudar en la delegación de funciones.
– Desarrollar procesos de negociación.
– Solucionar conflictos.
Se dice que únicamente el 10% de las discrepancias en el día a día de las empresas vienen del ‘qué dices’ y que el 90% de los enfrentamientos vienen del ‘cómo lo dices’. Por tanto, la mejora de la comunicación y del entendimiento de los demás es clave en el día a día de las organizaciones.
6. Como bien sabrás cada cliente tiene una necesidades distintas. ¿Cómo adaptas tus conferencias para que sean relevantes y efectivas en diferentes entornos empresariales y culturales?
Siempre es necesario, tanto por parte del conferenciante, como por parte del cliente, establecer una reunión de coordinación para conocer al fondo la situación de la compañía, el perfil del público, los objetivos que se pretenden conseguir con la formación (no solamente con la conferencia sino con el evento en general -que puede incluir formaciones internas u otras actividades-). Pasarlo bien mientras alguien escucha a una persona contar cosas es interesante, pero el trabajo del conferenciante no es eso, es transmitir de forma amena, didáctica e impactante a su audiencia una serie de mensajes que a la compañía le interesa transmitir. La alineación de los mensajes internos con los del ponente externo resulta crítica. Y para eso es necesaria mucha comunicación previa entre ambas partes.
Es cierto que hay veces que el cliente pide una conferencia muy generalista para un público muy generalista. Pero cada vez más el cliente pide que se adapte al máximo el mensaje del ponente externo a lo que ellos están requiriendo y necesitando en ese momento. Digamos que ‘los grandes éxitos’ del ponente ‘deben de sonar’, pero es necesario que haya también canciones preparadas para ese concierto en concreto. Es nuestro trabajo.
7. Por último, ¿qué acciones o cambios específicos esperas que los participantes implementen en sus vidas después de asistir a una (o varias) de tus conferencias)?
A mí me gusta decir que con que uno solo de los asistentes salga de la sesión habiéndose planteado un objetivo de cambio (aunque luego ya no lo cumpla) me daré por satisfecho. Muchas veces pensamos que los cambios en nuestras vidas han de ser cosas como muy radicales. Giros de 180º. Y eso es imposible. Eso únicamente pasa en las películas. El cambio en la vida se consigue con muchos pequeños pasos. Y cualquier paso comienza con la voluntad de darlo. De hecho, ese es el paso más difícil de dar.
Los aficionados a la montaña saben que el paso más complicado de una excursión de un domingo por la mañana es el que te saca de la cama. Cuando a las 6.00 suena el despertador en un día de frío y nieve, y has quedado con unos amigos para ascender una cima, te invaden las tentaciones de mandar un mensaje y decir que no vas, de seguir durmiendo, de pensar en lo calentito que se está debajo del edredón. Por eso, el paso más difícil es ese: el primero.
Por tanto, si alguien sale de la sesión con un objetivo concreto y pequeño, yo seré feliz. Si además al día siguiente lo cumple, miel sobre hojuelas.
Sin duda, Carlos Andreu tiene mucho que ofrecer al mundo a través de sus conferencias y ha sido muy amable al concedernos esta entrevista tan cercana de la cual estamos seguros que no nos olvidaremos.
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